Hoy leí un artículo que podríamos haber firmado muchos de nosotros. El artículo tiene por título un rotundo “Me aburro…” y creo que no le falta razón.
Si yo estuviera en la misma situación también me aburriría. Me refiero a la cantidad de eventos Spam cuyas invitaciones inundan nuestra bandeja de entrada, y que hacen referencia a “algo que está cambiando”.
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Es cierto, yo me aburro también de la falta de contenidos en tales eventos, del mismo modo que me aburra el hecho de que en blogs, twitter, facebook, etc no surjan contenidos relevantes a los que valga la pena prestar atención. Las aportaciones de valor son escasas, realmente escasas.
Tengo la sensación a veces de que lo que tenía que decirse ya está dicho hace tiempo, y que volver a insistir en ello sería reiterativo. Tal vez por ello, la frecuencia de los artículos en este blog ha bajado considerablemente. Llámale carga de trabajo, llámale falta de motivación, o llámale tal vez desinterés por pertenecer a este universo de contribuidores de contenido reciclado.
Son pocos los eventos a los que asisto, limitando mis apariciones a aquellos a los que voy de ponente, y aún y así, limito también el número de ponencias que acepto ir.
El pasado viernes tuve oportunidad de asistir como ponente a la Jornada sobre Identidad Corporativa del Instituto de Empresa, y a pesar de que hubo quien allí también se aburriera, me dejó con esa sensación de boca que dejan esos eventos que consideras útiles e interesantes.
Es cierto que es cansino escuchar tanto y tan seguido aquello de “algo está cambiando” pero también entiendo que si uno se queda con la sensación de que o necesita más contenido o tiene algo que aportar puede tomar la palabra cuando se le brinda la oportunidad y hacer la pregunta o la aportación que desee. No encuentro razonable marchar y dejar la posterior crítica sobre el evento. Claro que entre los que nos dedicamos a ofrecer servicios a hoteles, con mayor o menor éxito, queda especialmente ‘cool’ criticar los contenidos de otros, como método de aparentar el estar por encima de los mismos.
La cuestión es que ‘yo también me aburro’ y por ello, al igual que dejé de asistir a conferencias hace tiempo, también estoy siendo cada vez mas selectivo con lo que leo, y las personas a las que sigo en twitter. Las personas que me conocen personalmente conocen este hecho y las razones detalladas que me llevan a ello, pero tal como concluí mi presentación del viernes:
Tener presencia, sin mostrar esencia, genera rechazo o expulsión.